HABIENDOME REENCONTRADO..……
con un personaje que perdi de vista tiempo ha, mi mejor instancia fue comparable con un libro no abierto, siempre presente en el ámbito familiar que al haberlo reencontrado me permite descubrir su contenido al cabo de muchos años, pensamiento surgido de EL Ayer. Mi padre no tuvo una biblioteca, solo 3 libros estuvieron a mi disposición como cualquier otro objeto familiar: El Periquillo Sarmiento, Don Quijote de La Mancha, y Poemas y Sonetos de Sor Juana Inés de La Cruz, aclaro que si los títulos no son los auténticos, es como quedaron grabados en mi memoria pues me tiraba encima de la mesa para hojearlos, ver los dibujos y viñetas que contenían y cierto, también aprendí uno que otro verso a fuerza de encontrarlo en mi recorrido y creo que para mi edad no era lo más adecuado pues mi padre los dejó fuera de mi alcance en cuanto le recité de El Quijote: Es de vidrio la mujer, pero no se ha de probar si se puede o nó quebrar, porque todo podría ser, y es más fácil el quebrarse y nó es cordura el ponerse en peligro de romperse lo que no podrá soldarse….. Solo una nota más al respecto, a los 7 años lo único que me quedaba claro eran las palabras “romperse, quebrarse y soldarse” esta última porque el taller de carpintería de mi padre siempre estuvo junto al resto de nuestro hogar - de hecho, para mí era más importante- que el resto de la casa y cuando se trabajaba con la soldadora, a distancia, veía como algo mágico el estallido que provocaba tantas estrellas de colores.
Vuelvo a los libros en mi próximo blog.
con un personaje que perdi de vista tiempo ha, mi mejor instancia fue comparable con un libro no abierto, siempre presente en el ámbito familiar que al haberlo reencontrado me permite descubrir su contenido al cabo de muchos años, pensamiento surgido de EL Ayer. Mi padre no tuvo una biblioteca, solo 3 libros estuvieron a mi disposición como cualquier otro objeto familiar: El Periquillo Sarmiento, Don Quijote de La Mancha, y Poemas y Sonetos de Sor Juana Inés de La Cruz, aclaro que si los títulos no son los auténticos, es como quedaron grabados en mi memoria pues me tiraba encima de la mesa para hojearlos, ver los dibujos y viñetas que contenían y cierto, también aprendí uno que otro verso a fuerza de encontrarlo en mi recorrido y creo que para mi edad no era lo más adecuado pues mi padre los dejó fuera de mi alcance en cuanto le recité de El Quijote: Es de vidrio la mujer, pero no se ha de probar si se puede o nó quebrar, porque todo podría ser, y es más fácil el quebrarse y nó es cordura el ponerse en peligro de romperse lo que no podrá soldarse….. Solo una nota más al respecto, a los 7 años lo único que me quedaba claro eran las palabras “romperse, quebrarse y soldarse” esta última porque el taller de carpintería de mi padre siempre estuvo junto al resto de nuestro hogar - de hecho, para mí era más importante- que el resto de la casa y cuando se trabajaba con la soldadora, a distancia, veía como algo mágico el estallido que provocaba tantas estrellas de colores.
Vuelvo a los libros en mi próximo blog.